El estreñimiento es una queja muy común, especialmente en adultos mayores.1
El estreñimiento se define como el paso infrecuente o lento de heces o dificultad para evacuar las heces. Se asocia con varios síntomas que incluyen heces duras, esfuerzo, sensación de no poder defecar, evacuación incompleta, molestias estomacales e inflamación.1
Tiene una mayor presencia en los adultos mayores, especialmente los mayores de 65 años; está presente hasta en el 30% de la población geriátrica.1,2
Corresponde a uno de los grandes síndromes geriátricos, dado a una marcada disminución de la calidad de vida, así como diferentes complicaciones y su tendencia a volverse crónico.2
Las causas en este grupo de pacientes pueden incluir:1,3
- Tránsito lento
- Deshidratación simple o ingesta inadecuada de líquidos
- Enfermedades metabólicas (diabetes, hipotiroidismo, hiperparatiroidismo)
- Dieta baja en fibra
- Depresión
- Falta de movilidad
- Pacientes con antecedentes de cirugía abdominal o pélvica
- Consumo de varios medicamentos el mismo día
- Enfermedades neurológicas
- Trastornos que afectan a los músculos (Parkinson, miastenia gravis)
La molestia más común del estreñimiento es la impactación rectal de las heces, que puede presentar consecuencias graves para los ancianos como: obstrucción intestinal, úlceras rectales, retención urinaria e incontinencia fecal.3
El tratamiento, por tanto, debe enfocarse a evitar en todo momento la impactación fecal con la aplicación de medidas higiénico dietéticas.3
Tratamiento:
El paciente con estreñimiento debe ser tratado siempre de forma individualizada, teniendo en cuenta su experiencia.4
Es fundamental aliviar este molesto padecimiento, a partir de la mejora de los hábitos alimenticios:3
Ingesta abundante de líquidos
Abundante consumo de verduras con piel, hortalizas y frutas
Consumir pan preferentemente integral
Reducir el consumo de carnes rojas y condimentos
Comer en horas regulares, despacio y masticar bien
Nunca reprimir la necesidad de evacuación
También es necesario desarrollar hábitos para evacuar a la misma hora, sin prisa ni esfuerzos excesivos; la realización diaria del ejercicio físico y evitar el uso de laxantes irritantes.
La importancia de la fibra
La fibra dietética, que se encuentra principalmente en frutas, verduras, granos enteros y legumbres, es probablemente más conocida por su capacidad de prevenir o aliviar el estreñimiento.5
La fibra también pueden brindar otros beneficios para la salud, como ayudar a mantener un peso saludable y reducir el riesgo de sufrir diabetes, enfermedades cardiacas y algunos tipos de cáncer.
¿Qué es la fibra alimentaria?
La fibra dietética, también conocida como fibra alimentaria o alimenticia, incluye las partes de los alimentos vegetales que el cuerpo no puede digerir o absorber. A diferencia de otros componentes de los alimentos, como las grasas, las proteínas o los carbohidratos, que el cuerpo descompone y absorbe, la fibra no es digerida por el cuerpo.5
La fibra se clasifica comúnmente como soluble (que se disuelve en agua) o insoluble (que no se disuelve).
- Fibra soluble. Este tipo de fibra se disuelve en agua para formar un material gelatinoso. Puede ayudar a reducir los niveles de colesterol y glucosa en la sangre.5
- Fibra insoluble. Este tipo de fibra promueve el movimiento del material a través del aparato digestivo y aumenta el volumen de las heces, por lo que puede ser de beneficio para aquellos que luchan contra el estreñimiento o la evacuación irregular.5
Beneficios de una alimentación con alto contenido de fibra
Una dieta alta en fibra:
- Normaliza las deposiciones. La fibra dietética aumenta el peso y el tamaño de las heces y las ablanda haciendo más fácil la evacuación, lo que disminuye la probabilidad de estreñimiento.5
- Ayuda a mantener la salud intestinal. Una dieta alta en fibra puede reducir el riesgo de desarrollar hemorroides y bolsas pequeñas en el colon (enfermedad diverticular).5
- Reduce los niveles de colesterol. La fibra soluble que se encuentra en los frijoles, la avena, la linaza y el salvado de avena puede ayudar a reducir los niveles de colesterol total en la sangre, pues disminuye los niveles de lipoproteína de baja densidad o colesterol "malo".5
- Ayuda a controlar los niveles de azúcar en la sangre. En las personas con diabetes, la fibra, particularmente la fibra soluble, puede retardar la absorción del azúcar y ayudar a mejorar los niveles de azúcar en la sangre.5 Algunas personas pueden necesitar un suplemento de fibra, si los cambios en la dieta no son suficientes o si tienen ciertas afecciones como el estreñimiento.5